Un grupo de alumnos y alumnas de 1º y 2º de Bachiller del IES Cerro Milano de Alhama de Almería ha realizado una visita a Las Albuferas y el Museo de Adra para conmemorar el Día Mundial de los Humedales, que se celebra cada año el 2 de febrero. Gracias a esta actividad organizada por el Ayuntamiento de Adra los casi treinta jóvenes han conocido la historia y biodiversidad que atesora esta Reserva Natural abderitana.
Los alumnos y alumnas han visitado la exposición «La Viva historia de las Albuferas de Adra» situada en el Museo de Adra, que cuenta con un recorrido didáctico y audiovisual sobre la historia del humedal y la biodiversidad animal y vegetal que se puede observar en este espacio natural. Todo ello bajo las explicaciones de uno de los técnicos municipales. Además de realizar tareas propias de captura, manejo y anillamiento de aves, así como de mantenimiento de la Estación, en la Estación de Anillamiento Lorenzo García, siguiendo en todo momento las indicaciones de los monitores.
Por otro lado, el alumnado ha disfrutado de Las Albuferas de Adra, conociendo el Observatorio Casamatas, donde han podido observar e identificar las diferentes especies de aves acuáticas que cohabitan en este humedal. Pero también han recorrido la playa aledaña a este espacio, donde han recibido una charla informativa en relación a los humedales.
La actividad ha sido organizada por el Ayuntamiento de Adra, en colaboración con la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía y el Grupo de Anillamiento Rodopechys (SEO/BirdLife). El concejal de Medio Ambiente, Antonio Sánchez, ha acompañado al alumnado durante parte de la actividad.
Con estas visitas, el Ayuntamiento de Adra pretende promover y desarrollar una conciencia ambiental entre los jóvenes, generando valores y estilos de vida respetuosos con el medio ambiente, mediante un uso racional y sostenible de los recursos y aprender a identificar las amenazas del entorno natural.
Las Albuferas de Adra, Zonas Especial de Conservación
Las Albuferas de Adra poseen un enorme valor por su biodiversidad y conservación que las han hecho famosas a escala internacional. Además de contar con una variada población de aves residentes durante todo el año, tienen una gran importancia en los ciclos migratorios y dependiendo de la época, pueden encontrarse diversas especies que las utilizan como zona de descanso, reproducción y para alimentarse.
Este humedal costero constituye una fuente permanente de alimento y vida para la fauna residente en la zona y lugar de paso obligado en las rutas migratorias para las aves, entre los continentes europeo y africano. Compuesto principalmente por dos lagunas, Albufera Honda y Albufera Nueva, sorprende su situación en un entorno natural rodeado de zonas de cultivo intensivo, a manera de islas de agua inmersas en un mar de plástico. A pesar de los cambios ocurridos en su ambiente con el paso del tiempo y su reducido tamaño actual, el complejo palustre constituye un punto caliente de biodiversidad, con presencia de unas 600 especies de flora y fauna identificadas.
En 1989, la Albufera de Adra fue calificada declarada Reserva Natural, y en 1994 fue reconocida por la Convención Ramsar como un humedal de importancia nacional para las aves. Desde 2002, este espacio natural cuenta también con la figura de protección de Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). Además, desde este año 2016 está declarada como Zona Especial de Conservación (ZEC), que conlleva su inclusión en la red europea de espacios naturales Red Natura 2000.